Recientemente
me preguntaban en un medio de comunicación lo que pensaba del fichaje de
Raikkonen por Ferrari, ¿cómo le afectaría a Alonso tener como compañero a otro
campeón del mundo?. Mi respuesta: en principio, no tiene por qué ser negativo.
De
hecho, una práctica muy extendida es que los clubes fichen a los mejores
jugadores, incluso en un mismo puesto, para mejorar el rendimiento del equipo,
o los seleccionadores nacionales elijan a los mejores jugadores de su país para
conseguir la mejor clasificación, siendo normal encontrar a muy buenos jugadores
luchar por un mismo puesto. Por tanto, el problema no es la mayor o menor
competencia por un mismo puesto sino cómo se gestiona, ya sea por parte de los
entrenadores como de los jugadores.
Pero ¿cómo
puede el entrenador gestionar adecuadamente a jugadores que luchan por un mismo
puesto?.
En
primer lugar, es importante que clarifique a los jugadores qué espera de la
persona que ocupe el puesto, ya que de esta manera podrán saber qué es lo que
se les va a exigir y a partir de ahí, podrán establecer sus objetivos. Por
ejemplo, que sea un jugador agresivo, con
gran intensidad, o que sea un jugador creativo, que marque el ritmo del
partido, etc. Igualmente es conveniente que haya comunicación con ambos
jugadores, explicándoles qué cosas realizan bien, cuáles mal y sobre todo, motivándoles
para seguir esforzándose por conseguir el puesto.
Y los
jugadores ¿cómo afrontar adecuadamente la lucha por un mismo puesto en el
equipo?.